martes, 30 de noviembre de 2010

Madrid Zoom

Un bonito suplemento de ocio capitalino elaborado por todos los alumos del Máster. Planes de aire libre, comer, música, teatro, exposiciones, cine y libros:

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Las elecciones youtube

Si algo queda claro es que los gabinetes de comunicación de los partidos catalanes cuentan con gente que entiende bien cómo funciona internet y cuál es uno de sus conceptos clave para llegar a un público geek y con poco interés en política: la viralidad. Albert Rivera destapó la caja de Pandora en las pasadas elecciones posando desnudo en sus carteles. La estrategia pareció funcionar: un partido que intenta hacerse un hueco en el Parlament tiene que llamar la atención con ciertas dosis de escándalo. Ahora el concepto es online y multimedia.

Obviando el "pase de pecho" de Carmen de Mairena en un mitin -una candidatura que no hay que tomarse muy en serio-, hay dos partidos emergentes que han asumido la lección de Rivera: Alternativa de Gobern, de la ex-popular Montse Nebrera y Solidaridat Catalana per la Independencia, de Joan Laporta. Pero a diferencia del candidato de Ciudatans, ellos han buscado la viralidad online. El medio -Youtube- y el contenido -el porno- son dos clásicos en la red.

Pero el resto de partidos también se han apuntado a lo viral. El PSC vende orgasmos con el voto, y también protagoniza un vídeo imitando una escena de los Monty Python en La vida de Brian. No es casual: los cómicos británicos son muy populares entre los internautas geeks. El PP, por su parte, va a otro clásico de la red: un videojuego. Poco jugable y ridículamente breve, pero aún así otro intento de acercarse a ese público.

CiU es otra historia. No ha protagonizado ningún vídeo viral, y su trabajo se centra más en las redes sociales y las consignas lanzadas por Mas y los suyos. Es decir, la vieja fórmula adoptada en un nuevo medio. En cuanto a ERC, tampoco ha ido por la rama de la viralidad online, pero sí por la de la polémica habitual. Las declaraciones de Puigcercós fueron el pistoletazo de salida a la ristra de salidas de tono que han protagonizado estas elecciones.

Se anunciaba que estas iban a ser las elecciones de las redes sociales. Yo opto por hablar de las elecciones de youtube. El objetivo parece un publico joven, consumidor habitual de internet, al que parecen pensar que atraparán con los tópicos de la red: sexo, humor y entretenimiento.

martes, 23 de noviembre de 2010

Palabras que matan

Inaugurando el blog. Y qué mejor manera de hacerlo que con un articulito sobre el poder de la palabra (escrito originalmente para el Máster de ABC, Redacción de Opinión).

"Si hablamos de matar, mis palabras matan"
(Matador, Los Fabulosos Cadillacs)

La palabra es un arma de largo plazo. No nos interesa la forma de los punzones que mataron a Julio César o el calibre de la pistola que silenció a John Lennon. Las armas, blancas o negras, tienen un efímero instante de protagonismo que muere para siempre.

Las palabras también son armas. Actuán como un veneno que mata lenta pero eficazmente. No pueden reventar el corazón de un hombre, pero sí toda su fama. Las palabras que son armas actúan como un veneno incansable, un sambenito que marca sin distinción a vivos y muertos.

No sabemos cómo eran los punzones que llevaron a Julio César a la tumba, pero las palabras ¿Tu también, hijo mío? son una losa inamovible sobre la tumba de Marco Junio Bruto. Un traidor prototípico al que César sentenció para siempre con unas palabras que han dejado esculpida su reputación.

El revolver calibre 38 especial que se llevó a John Lennon es un accidente en su vida. Pero los versos Nothing to kill or die for marcarán para siempre al asesino Mark David Chapman, un muerto en vida al que matan sin descanso las armas eternas de John Lennon: sus palabras.

Las palabras son armas para dominar una pequeña parcela del mundo. Si las palabras son tus armas y las usas eficientemente, tendrás a millones de personas de todo el mundo escuchando Imagine una y otra vez a pesar de que lleves treinta años muerto. Si las balas y los puñales son tus armas, tendrás a millones de personas en todo el mundo utilizándote como ejemplo de todo lo negativo que hay en el mundo. No se puede silenciar a las palabras, sólo al mensajero.

En 1973, el cantautor chileno Víctor Jara murió asesinado por las fuerzas represivas del gobierno de Augusto Pinochet. Silenciaron su voz, pero no sus palabras. Pese a los esfuerzos de la dictadura golpista, hoy cualquiera puede leer el último poema que escribió en prisión.

Somos cinco mil
en esta pequeña parte de la ciudad.
Somos cinco mil
¿Cuántos seremos en total
en las ciudades y en todo el país?
Solo aquí
diez mil manos siembran
y hacen andar las fábricas.
¡Cuánta humanidad
con hambre, frío, pánico, dolor,presión moral, terror y locura!


El epitafio no escrito de Pinochet puden ser torturas, asesinatos y terror. El de Víctor Jara bien podría ser el verso de la canción de Los Fabulosos Cadillacs, inspirada en el cantautor: Si hablamos de matar, mis palabras matan.